NO MAS AFP EN CHILE
Este movimiento ha surgido hace ya
varios meses, busca oponerse y tratar de
cambiar el sistema de jubilación y capitalización individualidad que ha
protegido la manera de jubilar de los chilenos por más de treinta años. Este
procedimiento instaurado desde el año 1982, permite a los contribuyente y
cotizante jubilar por un ahorro individual después de los 65 años para los
hombres y 60 años para las mujeres.
El problema es que la expectativa
generada en esos años fue muy contraria a la que se están produciendo en estos
tiempos, ya que se prometía una jubilación muy amplia, como decía José Piñera
en esos entonces, con el 80 % de su sueldo, esto llevó a quienes muchos de
nuestros padres y abuelos se fueran al sistema de AFP o en el ámbito o contexto
histórico al que nos referimos, llevados hacia las AFP, como muchos de nuestros
padres adultos, por ende dentro del argumento de la dictadura era lógico que se
Iban a tomar este tipo de actitudes con
la gentes, eso género que la gran mayoría de las personas cediera voluntariamente,
o involuntariamente a este nuevo sistema, donde repito se les prometía el 80 %
de su sueldo a futuro.
La realidad es otra, donde el
sistema de AFP obtiene utilidades todos los años, grandes ganancias, pero la
pensiones son cada vez menos viable para la subsistencia, eso genera que la
gente tenga que postergar su fecha de jubilación o posteriormente jubilados seguir
trabajando, lo cual deteriora la calidad de vida y genera una crisis
estructural y un descontento social incontrolable.
El gobierno actual trata de
establecer una reforma al sistema como respuesta a las necesidades que las personas
están exigiendo: resguardar los fondos de pensiones de las fluctuaciones de los
mercados financieros, un cambio al mismo que no dependa de los cambios de las
bolsas de comercio y un sistema de reparto tripartita con aporte del estado,
empleador y trabajador que permita a los jubilados vivir dignamente.
El gobierno ha tratado de
enfrentar el problema, pero la clase política en general se ha quedado bastante
atrás, no tiene opinión y no colabora, todo lo contrario se aferra a este
modelo que lo único que establece es dificultad y obliga a trabajar más, no asegurando un
futuro adecuado, curiosamente las dictaduras de facto y todos los gobiernos
arreglan a bien su gente o como se dicen vulgarmente se arreglan los bigotes
entre ellos, los militares y sus cajas de previsión son las únicas que pudieron subsistir con los
jubilados. Ellos han podido establecer algunos funcionamientos que le permiten
tener pensiones dignas.
En la actualidad tenemos jubilados
clase A y clase B, esta desigualdad es la que hay que mejorar y claramente si
no las mejora el gobierno va aumentar la presión social, entendiendo que esta
presión ya está instalada y su dificultad nos puede llevar a consecuencias
difíciles que se pueden establecer tanto en el ámbito electoral como en crisis
sociales, por lo tanto, esta es la tarea y encrucijada que tiene la clase
política, dar solución a este problema en forma clara, precisa y de una vez, reformulando
una reforma seria, discutida, sin peros, de lo contrario nos veremos en unos
más años con las mismas dificultades y haciendo reformas a la reformas.