Benditas primarias

La lógica electoral de estos tiempos ad portas de una elección, nos enfrenta a una de las grandes encrucijadas de la política nacional, las elecciones municipales.

Las elecciones municipales en general, son un tipo de elección  menor a lo que ha poderes se refiere si se le compara con otras autoridades de mayor dirección que dirigen las provincias o las regiones. Sin embargo su existencia es de gran servicio y necesidad que tiene que ver con la administración de todos los elementos y situaciones que tengan que ver con el desarrollo de la vida cotidiana de la región en una pequeña escala.

Entendiendo que las elecciones primarias son elecciones reguladas en el sistema electoral público  y que pueden ser utilizadas por los partidos políticos para la nominación de candidatos a cargos de elección popular, cuyos resultados son vinculantes para las colectividades, esto implicaría que los nominados pasan a ser directamente candidatos de la elección definitiva.

De ahí el gran interés de los militantes de las colectividades políticas para optar como candidatos a la elección popular para ser elegidos candidatos para estas elecciones municipales 2016, las que se ven serán muy reñidas, con pocos candidatos; si las municipalidades son pequeñas, con muchos postulantes independientes, donde se verán los partidos políticos experimentando en sus estructuras y en la ideas de administración municipal.

Bajo esa estructura de idea de administración municipal para los partidos es muy relevante tener una buena representación de alcaldes y concejales en los distintos municipios a lo largo del país  por la gran cercanía que estos tienen con las personas, por ello, para los partidos es importante contar con la mayor cantidad de candidatos al municipio electos, por lo que forma equipos de campaña para apoyar y asegurar la elección de sus candidatos.

El nuevo sistema democrático llego para quedarse  empezando a mejorar la estructura política  de las ciudades, y está el otro hecho común que muchos alcaldes en ejercicio no aparecieron en las encuestas para re postularse  a su cargo, hecho que pudo producirse por la mala imagen o el desgaste político del  determinado alcalde, ahora la pregunta es porque estos alcaldes esperan que este hecho ocurra, cuando mejor sería que ellos mismos den un paso al costado y busquen postularse a un nuevo cargo o subir en su  escala de representación, senador, diputado, etc..

Las primarias vienen a terminar con los vicios que nos presentaba el antiguo sistema, alcaldes y concejales que vienen repitiéndose desde el  año 1992, muchos años en sus cargos siendo reelegidos y reelegidos, lo que en esencia no está mal, pero la pregunta inocente que uno se hace, los electores están votando por inercia, por el menos malo, están votando realmente porque esa autoridad satisface sus intereses, esa es la gran incógnita, por lo tanto el sistema de  primarias recién instalado trajo en parte la solución a este problema, el hecho que dentro de sus mismos sectores les hayan salido muchos participantes y que estos nuevos individuos hayan desbancados  a muchos alcaldes eternos que estaban en las distintas ciudades que ya  pertenecían al inventarios de cada localidad.

Al tratarse de un mecanismo electoral nuevo tendrá un impacto significativo de participación, como va actuar la ciudadanía ante este hecho ya que la política en estos meses está muy desacreditada y lo más probable que en este escenario ideal de votantes ocurra un hecho de lo que estoy hablando, pero seguramente va ocurrir todo lo contrario, ya que generalmente  en este escenario apático  lo más probable que la cantidades de electores que vaya no sea mucho, por lo tanto eso tampoco le va ayudar al sistema municipal, ni al sistema de voto.

 Por último, como politólogo los invito a participar de las próximas elecciones municipales del mes de octubre,  votando por quien según Ud. Cree es el mejor de su comuna y recordándole que desentenderse de la política es permitir ser gobernado por los peores hombres, que su voto es la herramienta que le permite tener igualdad con un político o empresario.