La toma de posesión del estrecho de Magallanes de Chile

 

La toma de posesión del estrecho de Magallanes de Chile 

El 21 de septiembre pasado se cumplió un año más de la toma de posesión del estrecho de Magallanes en nombre de la República de Chile, tarea encomendada por el presidente de ese entonces general Manuel Bulnes y a petición por cartas desde su exilio en Lima de nuestro prócer de la Patria Don Bernardo O’Higgins Riquelme solicitando la integración de este suelo al territorio nacional por razones geopolíticas, demostrándonos fehacientemente la visión geopolítica y estadista que tenía nuestro libertador. 

Curiosamente en Magallanes se le dio más rimbombancia a los 500 años del descubrimiento del estrecho que a la toma de posesión misma. 

Debemos recordar a todos los regionalistas, magallánicos que la toma de posesión del estrecho es motivo de sentirnos orgullosos de ser magallánicos, más aun, sintámonos más orgullosos de ser chilenos, porque estamos haciendo patria donde muchos no quieren llegar, somos parte de Chile, somos herencia de muchos. 

No obstante, el gran monumento recordatorio a la goleta Ancud y a sus 23 tripulantes; entre ellos dos mujeres, sueño anhelado del pueblo chilote de tantas décadas de ver reflejado algún día su esfuerzo y sacrificio aventurero en esta obra que se localiza en la costanera que costó años poder materializarla, fue verdaderamente un parto porque, tal vez, el racismo a los Chilotes no se los permitía, quizás, algunos desconocen estos hechos de la historia, reconozcamos que solitariamente como magallánicos no somos nada. Por el contrario, somos parte de un país y cumplimos con una labor soberana que el mismo padre de la Patria nos encomendó en sus encíclicas y esa es la importancia de la presencia del Estado chileno en Magallanes. Cuando lo entendamos, vamos a ser una mejor región, seremos una parte muy fundamental y mayormente comprometida con el desarrollo del país. 

Bernardo O’Higgins jamás pensó que esta región iba a ser una región con bandera propia, que iba a ocupar el sectarismo de algunos, la discriminación y la soberbia elítica de otros que no se sienten integrados y que tampoco se quieren integrar a las necesidades del resto del país; salvo cuando les conviene, en donde hay grupos de interés que cruzan las corrientes ideológicas políticas y que se sienten ciudadanos especiales del país, cuando todos los chilenos en las distintas constituciones que hemos tenido reconocen que todos los ciudadanos de esta patria somos iguales ante la ley y que nadie es especial uno sobre otro. 

Por lo tanto, que esta obra conmemorativa de la Goleta Ancud y a su hito de los 178 años de la toma de posesión del estrecho más la incorporación de un millón 300 mil kilómetros cuadrados incorporados oficialmente al país, se sume a la obra de circunnavegación de los 500 años del descubrimiento de dicho estrecho, más aún, que los sueños de nuestro libertador por la región se hayan cumplido, entre tanto, nosotros los magallánicos terminemos con nuestras diferencias y a trabajar con más visión, voluntad y determinación.     

 

Nelson Leiva Lerzundi

Cientista Político