El monumento del General Baquedano es arriado para ser recompuesto

 

El monumento del General Baquedano es arriado para ser recompuesto 

Durante el estallido social y continuando tras el acuerdo para el cambio de la constitución, el monumento al General Baquedano en Providencia se ha convertido en el foco de la disputa por los cambios sociales del país. Iniciando una larga batalla simbólica por la representación de ciertos valores o principios, los que desean renovarse así como la carta magna de la nación. Actualmente, se ha retirado de su ubicación para pasar a restauración, traduciéndose en un triunfo parcial para aquellos en contra. 

Cabe preguntarse, ¿Quién fue el General Baquedano? Manuel Jesús Baquedano Gonzales (1823-1897), fue comandante en jefe del ejército de Chile entre 1880 y 1881, durante la Guerra del Pacífico. Senador de la república en dos períodos, entre 1882 y 1894. Luchó contra su padre en la guerra civil en 1881 (batalla de Loncomilla). Finalmente, fue presidente provisional de Chile entre el 29 y el 31 de agosto de 1891. 

Y así como cada personaje tiene su historia, todos los monumentos también la tienen, es decir, existen las circunstancias por las cuales fueron concebidos. Este en particular es conmemorar al héroe y los actos de la guerra del pacífico. Además, para muchos simboliza la unidad nacional, el idealismo del guerrero chileno al servicio de su patria, llegando a entregar su vida por el cumplimiento del deber, así como Arturo Prat, Ignacio Carrera Pinto y tantos otros. Nuestros héroes son figuras que van más allá de cualquier color político, de izquierda, derecha, centro o los gobiernos de turno, ellos son parte de la unidad nacional, de nuestra tradición, son parte de nuestra historia y la historia de un país que se quiere, se respeta. 

Entonces, por qué desconocemos su rol de combatiente destacado, héroe nacional y descontextualizamos su figura histórica. Debemos hacer el trabajo de ubicarlo en la línea del tiempo al que perteneció; en sus labores de guerra, dirigiendo, planificando y combatiendo. El general Baquedano ganó una guerra luchando junto a muchos chilenos y chilenas para anexarnos un territorio, que hoy es la fuente de mayor ingreso del país. El monumento o cápsula conmemorativa es un reconocimiento a su ejemplar carrera militar y vida personal dedicada a la patria, ese es su valor. 

Por lo tanto, creo como la mayoría que se ganó su cápsula de memoria, la que se debe respetar por los hechos, por la historia, por la sangre derramada de muchos chilenos y chilenas olvidados. Baquedano no representa el patriarcado, el neoliberalismo, no representa a una elite política, no está en las reyertas políticas, de izquierda, del centro, la derecha. Es un militar que escribió su historia en el campo de batalla, en otro momento de la historia, con otros códigos de vida. Es decir, por apoyar a Arturo Prat, usted va a ser pinochetista o por apoyar a los obreros que sufrieron muertes ilegales en las salitreras cuando protestaban, usted va hacer de izquierda. No, son hechos de la historia, y los hechos de la historia se respetan como tal. 

Indiscutiblemente, esto no significa que las personas no puedan manifestarse libremente o que no puedan expresar su descontento en la llamada plaza Baquedano o Italia, ahora dignidad. Está bien que así sea, pero no con una violencia inusitada, repudiable, sin respeto a sus compatriotas. Por otra parte, tu democracia termina cuando trasgredes la del otro. 

Para concluir, ¿Cuál es el mejor lugar para ubicar nuestros héroes? Qué duda cabe, cada uno de nosotros pensara de una manera diferente y habrán muchos, cientos de pensamientos, muchos tal vez coincidan, pero llegaremos a lo de siempre, no podremos ponernos de acuerdo y la discusión será eterna. Creo que el mejor lugar radica en el pensamiento y alma de cada chileno. Se debe recordar y respetar los legados que recibimos y asumir nuestra historia para ser mejores ciudadanos en los tiempos contemporáneos. 

 

Nelson Leiva Lerzundi

Cientista Político